La baja de los casos, el conocer la verdadera letalidad del virus, estar consciente de las implicaciones, todo esto ha llegado para tomar la decisión definitiva, regresamos a laborar, a las clases, a la vida diaria.
Sin lugar a dudas muchos ya se sienten desde ahora aliviados, algunos otros comenzaran las sospechas, justas o no sobre la influenza, ¿Qué sucedió?, ¿paso algo que todo sentimos o solo pensamos que así fue?
Mas allá de todo, el jueves regresamos a clases, pero con la previsión de lavarlos las manos, seguridad sanitaria ante todo, la vida continuara pero no olvidara, por que como las crisis económicas, las protestas, las elecciones, esos momentos históricos, este se ha quedado al menos dos semanas tatuado en nuestra piel llamada memoria.
¿Cuánto tiempo nos tardara olvidar?
Pues México continua, el mundo preocupado todavía, pero el internet su inmediatez ya nos han traído las campañas, regresamos del hastió de la inanición, a el hastió para ejercer la inanición electoral.
Algo seguro, cuando veamos a alguien estornudar, pensaremos dos veces antes de acercarnos.
Sin lugar a dudas muchos ya se sienten desde ahora aliviados, algunos otros comenzaran las sospechas, justas o no sobre la influenza, ¿Qué sucedió?, ¿paso algo que todo sentimos o solo pensamos que así fue?
Mas allá de todo, el jueves regresamos a clases, pero con la previsión de lavarlos las manos, seguridad sanitaria ante todo, la vida continuara pero no olvidara, por que como las crisis económicas, las protestas, las elecciones, esos momentos históricos, este se ha quedado al menos dos semanas tatuado en nuestra piel llamada memoria.
¿Cuánto tiempo nos tardara olvidar?
Pues México continua, el mundo preocupado todavía, pero el internet su inmediatez ya nos han traído las campañas, regresamos del hastió de la inanición, a el hastió para ejercer la inanición electoral.
Algo seguro, cuando veamos a alguien estornudar, pensaremos dos veces antes de acercarnos.